El jueves 22 de febrero se realizó la primera reunión en el marco del debate paritario del 2018 para los trabajadores y trabajadoras de la salud provincial. Desde SIPRUS se planteó con énfasis no sólo la necesidad de una recomposición salarial, sino las condiciones de trabajo. Continúan las discusiones la semana próxima.
“Planteamos la necesidad de un aumento salarial que recomponga el poder adquisitivo mas allá de la cláusula gatillo que el gobierno consideró como parte de la propuesta. Nuestra idea es avanzar hacia un salario mínimo, vital y móvil para el cargo testigo de 24 horas”, explicó María Fernanda Boriotti, Presidenta del Sindicato.
Pero la discusión con las autoridades provinciales también se centró por iniciativa del gremio en las condiciones de trabajo, fundamentalmente en lo que respecta a los contratados y monotributistas que hoy ascienden a más de mil doscientos profesionales. “No estaba en la agenda del gobierno la titularización y lo consideramos un factor fundamental para avanzar en la negociación”, afirmó Boriotti.
Por su parte, el gobierno provincial evaluará si ese punto es parte de las materias a negociar, mientras aún queda pendiente la implementación de acuerdos paritarios de otros años que “quedaron bloqueados sin conocerse los motivos, como el régimen de permutas y traslados, de ingresos y de las horas en disponibilidad”, explicó la referente.
La próxima semana será el segundo capítulo de esta paritaria 2018. Quizás como prometieron con la paritaria docente, los funcionarios expongan para entonces una propuesta concreta en materia de incremento.
Prensa SIPRUS – FESPROSA